Los Mossos d’Esquadra han anunciado la apertura de una investigación tras un ciberataque tras la filtración de un documento de un buzón corporativo del cuerpo con datos de carácter personal de los agentes. Este incidente, en el que los ciberdelincuentes obtuvieron acceso a datos sensibles, ha sido comunicado a través de un anuncio público y en las redes sociales.
Según el comunicado, la filtración ocurrió en un área muy limitada del ciberespacio. Tras conocer el incidente, se activaron todos los protocolos necesarios. Entre las medidas tomadas, se incluye la activación de la Comisión de Evaluación de Riesgo y Protección, presidida por el Comisario Jefe, junto con otros mandos que forman parte de este organismo.
Se estima que alrededor de setenta mossos se han visto afectados por la filtración del documento. En respuesta, se han tomado medidas adecuadas, incluyendo la notificación a todos los afectados y a la Agencia de Protección de Datos. Además, la División de Investigación Criminal (DIC) ha iniciado una investigación para aclarar los hechos y se ha informado a la autoridad judicial correspondiente.
Como medida de precaución, se ha bloqueado el buzón de correo electrónico afectado y se ha activado el Protocolo de Tecnologías de la Información y Comunicación. El Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información, a petición de la Comisión de Evaluación, Riesgo y Protección, ha bloqueado los buzones corporativos no nominales, que se reiniciarán con nuevas contraseñas.
Los Mossos d’Esquadra están trabajando para “neutralizar posibles amenazas” y están coordinados con la Agencia Catalana de Ciberseguridad. El Área Central de Cibercrimen de la DIC se ha hecho cargo de la investigación.
Los agentes afectados han sido informados de la filtración desde el momento en que se tuvo conocimiento de los hechos. Se les mantendrá informados a través del comité de seguimiento del incidente, que proporcionará actualizaciones y les ofrecerá la posibilidad de denunciar los hechos a través del Área Central de Cibercrimen. La jefatura ha convocado una reunión extraordinaria con los sindicatos para explicar el incidente y las medidas adoptadas.